Proyecto común entre centros de Educación Secundaria que versa sobre la resolución de conflictos y mejora de la convivencia en los centros educativos, utilizando las plataformas digitales con el fin de abrir foros de debate y comunicación, así como publicación de los materiales elaborados.

lunes, 25 de febrero de 2013

Una familia se querella contra Gossip por la publicación de injurias.

Una familia ha presentado una querella, que ha sido admitida a trámite por un juzgado de Barcelona, contra la empresa que gestiona Gossip por unos comentarios injuriosos publicados en esta aplicación y que afectan a un menor de edad, según han explicado a Europa Press fuentes cercanas al caso.

Dichas fuentes han concretado que la querella no persigue sancionar al autor de la publicación, que es otro menor, sino exigir judicialmente a la empresa la identidad del responsable de los comentarios, al entender que la compañía es la responsable civil subsidiaria, ya que las publicaciones se han realizado bajo la condición de anonimato.

En concreto, se trata de varios comentarios presuntamente injuriosos publicados durante el mes de enero en una de las 'salas' de la aplicación, la correspondiente al municipio de Sant Cugat del Vallès (Barcelona), que cuenta con casi 2.000 usuarios.

La familia, vinculada a la plataforma Afectados Gossip, reclamó insistentemente que se retirasen los comentarios, al considerarlos injuriosos, además de que el afectado no podía defenderse por no contar con un iPhone o iPad, un requisito imprescindible para el uso de la aplicación.

Finalmente, la empresa --Crows&Dogs-- accedió a retirar dichos comentarios, aunque los querellantes consideran que la compañía encubre a los autores de este tipo de rumores y vejaciones. Esta es la primera querella que presenta la plataforma, que reivindica precisamente que se pongan medios ante la indefensión de los menores como un código de conducta basado en la legalidad española, que se vete el acceso de los menores y se prohíba el anonimato.

Hasta ahora, los afectados por los comentarios publicados en esta aplicación se han limitado a presentar denuncias ante los cuerpos de seguridad, una medida que la plataforma, que también ofrece cobertura legal, considera insuficiente para promover los cambios requeridos a este tipo de aplicaciones.

Estos últimos días se han disparado las alarmas en centros educativos catalanes, a raíz de la aparición en las redes sociales de dos nuevas herramientas de cotilleo -las páginas informer y la aplicación para móviles Gossip-, que han llevado al límite el simple chismorreo. Se han extendido rápidamente entre institutos y universidades catalanas, convirtiéndose en una potencial arma que puede disparar los casos por ciberacoso. Los Mossos d'Esquadra han recibido, en las últimas tres semanas, seis denuncias por insultos y vejaciones relacionadas con estas aplicaciones.

Gossip se lanzó el pasado 10 diciembre y desde entonces ya sobrepasa los 32.000 usuarios. La aplicación se organiza basándose en salas temáticas de todo tipo de ámbitos, desde un barrio a un programa de televisión, pero las alertas han saltado por la especial expansión que ha tenido el programa entre los institutos, ya que con un nombre falso o un perfil anónimo los menores pueden hacer comentarios libremente sobre sus compañeros de clase.

lunes, 18 de febrero de 2013

Vídeos. El BULLYING debe parar. NO al BULLYING.






 
http://tennarices.noalacoso.org/


http://tennarices.noalacoso.org/



El 20% de los adolescentes utiliza internet para amenazar a conocidos.

Foto: Gtres

  • El 55% de los escolares de entre 12 y 18 años justifica el uso de la violencia.
  • Más de una cuarta parte se muestra interesada en manejar armas de fuego.
Muchas veces amparados en el anonimato, el 27% de los adolescentes utiliza Internet para insultar a amigos o conocidos, y hasta el 19% profiere amenazas. Conforme se entiende el uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales, crece la violencia verbal y los contenidos violentos en ellas. Reflejo de una sociedad en la que hasta el 55% de los adolescentes cree que la violencia está justificada.

Son algunas de las conclusiones del informe 'Adolescentes y Social Media: 4 generaciones del nuevo milenio'. Promovido por la Confederación Española de Centros Educativos (CECE) y apoyado por la Comisión Europea, su objetivo es reducir la exposición, consumo e impacto de la violencia en todos los ámbitos, entre ellos, el digital.

"Las redes sociales e Internet no son la causa de la violencia. Cualquier persona que es atacada en las redes sociales ha sido atacada antes en el colegio o en su barrio", afirma Reynaldo Rivera, director del Intermedia Consulting y uno de los autores del estudio, realizado con 7.000 adolescentes de 50 colegios de España e Italia. Por ello, considera que las campañas de prevención sobre el uso de Internet deberían centrarse en "fomentar las relaciones" en lugar de alertar sobre los "riesgos" de la Red.
 
Gustavo Entrala, director general de la agencia de publicidad 101 -artífice de la entrada del Papa en las redes sociales- ha destacado la "violencia verbal en Twitter", precisamente poniendo como ejemplo los mensajes que recibe @pontifex (la cuenta de Benedicto XVI). "En España no sabemos debatir. Cuando alguien no comparte nuestro punto de vista, pasamos al ataque verbal, especialmente en las redes sociales", afirma.

Entrala desdeña "cualquier acción encaminada a reprimir el uso de la tecnología y las redes". "Lo que hay que hacer", afirma, "es enseñar a convivir con la diversidad de opinión en la Red". Así, aboga, por ejemplo, por seguir en Twitter a gente que piensa diferente. "Precisamente Twitter y los medios sociales son un excelente medio educativo en cuanto a convivencia".

 «Es clave enseñar a convivir con la diversidad de opinión en la Red»
Gustavo Entrala.

Violencia "justificada".

El estudio arroja cifras alarmantes. Según sus datos, más de la mitad de los escolares de entre 12 y 18 años cree que "la violencia está justificada para conseguir fines determinados", como defender sus derechos; el 25% trabajaría en una empresa que difundiera contenidos violentos, mientras que cerca del 24% inculcaría a sus hijos su uso en caso de necesidad y el 32% la emplearía para proteger "sus derechos". Además, más de una cuarta parte de los adolescentes se muestra interesada por manejar armas de fuego, aunque sólo el 12% firmaría una petición para que fuese legalizado su uso.

Unas cifras que parecen contradecir el 56% que firmaría un manifiesto contra la violencia, o el 30% que cree apropiado aprobar leyes que limiten los contenidos violentos en los medios. "Se trata de una dicotomía. Una cosa es el uso general y otra la aplicación en casos determinados. Así, en lo personal actuaríamos de una manera, en lo social de otra. "Como cuando exigimos que el Gobierno haga algo", perseguir el fraude fiscal, por ejemplo, sin ser consecuentes en la esfera personal -no pagando el IVA-.

Consumo de contenidos digitales.

El estudio revela también que el 42% de los adolescentes dedica más de tres horas diarias a sus perfiles sociales, y que el 72,5% tiene al menos un perfil en redes sociales. Estas cifras chocan con la escasa 'proactividad' que muestran los adolescentes. La mayoría se limita a consumir contenidos, y sólo el 14% tiene un blog o sube vídeos.

Rivera destaca que los adolescentes que pasan muchas horas 'online' tiene menos capacidad relacional y de desarrollar amistades en el mundo 'offline'. "Sólo el 30% de los adolescentes desarrolla proyectos concretos con sus amigos, como hacer deporte o ir al cine, y sólo un 4% ha participado en una campaña con fines sociales. Unos resultados "preocupantes por la pérdida de capital humano que suponen" para la sociedad.

"Los peligros que encuentran los niños 'online' son los mismos que 'offline'", explica Entrala. Así, dejar navegar a un menor sin control sería como "dejarle pasear solo por la noche por un barrio conflictivo, o por un parque sin vigilancia". Sin embargo, el control en ambos 'mundos' difiere notablemente. Según el informe, el 67% de los adolescentes tiene un nivel de supervisión alto por parte de sus padres, en el sentido de que saben qué hacen en su tiempo libre, se interesan por los estudios... Pero cuando se trata de internet, el 42% no controla el tiempo que navegan sus hijos, el 48% no les da consejos al respecto, el 42% nunca ve los mismos contenidos en televisión y el 73% jamás ha jugado con sus hijos a videojuegos.

Para Rivera, "la falta de diálogo intergeneracional está detrás de esta mayor exposición a la violencia y a otras conductas de riesgo". Según sus datos, el 60% de los encuestados no habla "nunca o casi nunca" con sus padres sobre lo que hace o le sucede en internet. Pero la falta de diálogo no se limita a asuntos como las nuevas tecnologías. Así, el 71% de los adolescentes no sabe qué piensan sus padres de religión o política y al 75% de ellos no le han explicado cómo gestionar sus emociones.

En este sentido, Rivera alerta de que "la falta de vida familiar genera ciudadanos desconectados de la sociedad" y sin capacidad para discernir qué contenidos son adecuados o no. "No es cuestión de no hablar con desconocidos en las redes", defiende José Antonio Ruiz San Román, de la Universidad Complutense de Madrid. "La vida está llena de relaciones con desconocidos. Lo importante es saber con quién y cómo relacionarte".

Acoso escolar: Del patio del instituto al ciberespacio.

 Foto: José Cuellar

¿Qué se cuece en el patio de los institutos? No es novedad que en los años en torno a la adolescencia el acoso escolar encuentra un terreno abonado en los jóvenes inseguros que forjan a trompicones su entrada en el mundo de los adultos. Sin embargo, la explosión de las nuevas tecnologías, el acceso masivo a la telefonía móvil e Internet, y el despegue de las redes sociales ha hecho que lo que comenzó en un pasillo o en el patio del instituto rápidamente cobre vida propia en el ciberespacio, donde la realidad se difunde corregida y aumentada.

"El proceso ahora es rapidísimo", explica Mara Cuadrado, psicóloga especializada en la mediación y tratamiento del acoso escolar. "Alguien tiene un encontronazo con otro u otra y esa misma tarde cuelga algo en Internet, en las redes sociales, y al día siguiente hay un 'bullying' de todos los demás hacia la víctima. Es inmediato". En su experiencia, en la última década esto también ha disparado los casos de acoso psicológico frente a los de abuso físico, que se han mantenido estables.

"Alguien tiene un encontronazo y esa misma tarde cuelga algo en las redes sociales y al día siguiente hay un 'bullying' de todos los demás hacia la víctima. Es inmediato".
Mara Cuadrado, psicóloga especializada en acoso escolar.
 

Aterrorizada por desconocidos.

Eso, exactamente, le sucedió el año pasado a Marta (nombre ficticio). Tenía 13 años y, cuenta su madre, "siempre sacaba muy buenas notas y le gustaba mucho el colegio". Todo empezó con una niña que la insultaba: "La llamaba hija de puta, marginada..." relata todavía angustiada su progenitora. Pero, de pronto, el asunto escaló: "Yo notaba que me excluía la gente y al ir por los pasillos me insultaba, gente mayor y más pequeña que yo no conocía de nada", dice la cría, con voz tenue al otro lado del hilo telefónico. Por fin descubrieron lo que pasaba. Alguien había subido una foto suya a una popular red social a la que se accede por invitación y Marta se había convertido en objeto de chanza general. A ello se sumaron empujones por las escaleras y un acorralamiento en el patio. Hasta que la niña se partió en mil pedazos.

"Yo notaba que me excluía la gente y al ir por los pasillos me insultaba, gente mayor y más pequeña que yo no conocía."
Marta, 14 años, víctima de acoso escolar.


Se le empezó a caer el pelo, y el tratamiento psicológico se convirtió en psiquiátrico. Llegaron las autolesiones, las voces que le hablaban sólo a ella y un terror desmesurado. "Me dan miedo los niños", confiesa esta alumna ejemplar enamorada de los animales. La intervención del centro no hizo sino empeorar la situación, y acabaron por sugerir que el problema era en realidad de la propia niña. Un argumentario habitual en el sector educativo para zanjar el problema, afirma el psicólogo especializado en acoso Iñaki Piñuel.
Ha pasado un año y, aunque la han cambiado de centro, acudir al instituto le desata ataques de pánico. Estrés postraumático. De momento, capea el temporal en casa con los profesores del Servicio de apoyo educativo domiciliario de la Comunidad de Madrid.
"El fenómeno conflictivo que más crece en Internet es el ciberbullying", explica Guillermo Cánovas, director del Centro de Seguridad en Internet para España del programa de la Comisión Europea y presidente de la organización de protección del menor Protégeles.
"El acoso psicológico ha existido siempre pero el ciberbullying es mucho más dramático", advierte Cánovas, que enumera características clave que lo hacen "mucho más dañino y especialmente doloroso". Por un lado, la publicidad: "Es una situación que no se da sólo en el patio del colegio o a la salida de clase, se da en Internet y es público. Lo pueden ver tus amigos, tus padres, tus profesores, mucha otra gente, y es una humillación pública", precisa el experto. No sólo eso, además permite la participación de terceros, que añaden comentarios, burlas, refuerzan lo que otros están diciendo, "de forma que el menor resulta acosado por personas que no conoce ni le conocen".
"La violencia psicológica, como la física, produce nuevos adeptos. La gente se agrega porque ser miembro de la masa linchadora es una forma de integrarse socialmente", explica Piñuel. "Es como una bola de nieve, va a más y no lo puedes parar". Por eso es fundamental atajar el problema a tiempo, dice este experto, autor de un estudio que apunta que un 23% de los niños y adolescentes españoles sufre en silencio conductas de maltrato recurrente en las aulas. Según Piñuel, el sector educativo "minimiza" la realidad del acoso, limitándolo a los casos más extremos. Jesús María Sánchez, presidente de Ceapa (Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos), cree que "el hecho existe, pero no debe de magnificarse como algo que se está viviendo continuamente". Mientras, la defensora del profesor, Inmaculada Suárez, destaca la dificultad en ocasiones de detectar el abuso, y la delicada posición del docente, que debe interpretar si se trata de un enfrentamiento puntual o un caso reiterado de maltrato.

Las armas: del SMS al 'post'.

A veces el abuso se produce enviando mensajes amenazadores de móvil, otras, colgando en el perfil virtual de la víctima comentarios humillantes, en ocasiones, como el caso de Marta, el acosado ni siquiera está en la red social, pero usan su imagen para burlarse de él. Y un último tipo, cada vez más frecuente, añade Cánovas, es la usurpación de identidad: "Para causarle un perjuicio crean un perfil falso con el nombre de este menor y lo usan para generarle un conflicto con terceros y que estos, a su vez, le generen un problema en consecuencia".

"La violencia psicológica, como la física, produce nuevos adeptos. La gente se agrega porque ser miembro de la masa linchadora es una forma de integrarse socialmente"
Iñaki Piñuel, psicólogo especializado en acoso.
 
Parte del problema deriva la gran exposición de los niños y adolescentes al móvil e Internet. Gran parte de sus relaciones sociales se desarrollan ahora en este universo virtual y paralelo, ventana constante de exhibición. Y conviene saber dónde poner los límites para evitar males posteriores.
Mara Cuadrado relata, por ejemplo, casos de chantaje en los que una adolescente ha enviado a algún 'ligue' fotos subidas de tono y, al romper con él, éste la amenaza con hacerlas públicas. O los riesgos de la cada vez más común práctica entre los jóvenes de hacerse fotos con ropa provocativa en los probadores de centros comerciales para colgarlas en la web, que en ocasiones van in crescendo y puede dar lugar a imágenes que muestren más de lo que el afectado hubiera a posteriori deseado.
Los episodios de ciberacoso, además, pueden prolongarse en el tiempo, porque depende de dónde estén colgados los contenidos puede ser difícil retirarlos y puede que la situación de acoso "haya terminado en el colegio pero toda la información y burlas siga en Internet, aun habiéndose resuelto el conflicto".
Pero, peor si cabe que todo eso, es el hecho de que no se restringe a los muros del colegio o del instituto. "No descansas", dice Cánovas, el ciberacoso persigue a la víctima hasta el ordenador personal de su dormitorio o viaja con él en el móvil que lleva en el bolsillo.
La única 'ventaja' del ciberacoso es que deja rastro. "En el ciberbullying es preciso recopilar siempre esa evidencia electrónica. Haz un pantallazo, imprímelo, contacta con la red social para que guarden esa información", explica Ana Fernández, coordinadora del departamento jurídico del Centro de Internet segura Protégeles. Piñuel concurre, y destaca que a menudo cuando el acosador sabe que está siendo monitorizado cesa su agresión, por lo que su equipo trabaja con una empresa especializada que registra los contenidos ofensivos, lo comunica automáticamente a la Policía y certifica que no han sido manipulados por el usuario para que sirvan como prueba legal si éste decide interponer algún tipo de denuncia.
 





 

IES Valle de Piélagos. Jornadas de formación en el albergue municipal de Boo de Piélagos.

Los alumnos ayudantes de 1º de ESO del IES "Valle de Piélagos" han celebrado unas jornadas de formación en el albergue municipal de Boo de Piélagos.La formación fue encaminada a reforzar el conocimiento del grupo y a practicar la escucha activa y el trabajo colaborativo. De igual forma se prepararon algunos aspectos del encuentro de alumnos de Sevilla.